¿Porqué visitar a un psicólogo y cuáles son los beneficios de una psicoterapia?
Siempre que afrontas una situación que está afectando negativamente en tu vida personal, familiar o social, te preocupa o te hace sufrir y no sabes cómo resolverla, un psicólogo puede ofrecerte las herramientas que necesitas para que halles la solución.
La psicoterapia ofrece a las personas una explicación para su sufrimiento y ayuda a que se den cuenta de que pueden hacer algo para mejorar su situación. La psicoterapia hace que la persona se plantee aspectos de su vida y su manera de afrontar los problemas a través de la revisión de nuevos significados sobre uno mismo y sobre lo que le rodea, mejorando sus relaciones con los demás o expresándose emocionalmente de manera sana, entre otros cambios positivos.
El ser humano tiene una capacidad de cambio extraordinaria. Las personas somos capaces de salir adelante en situaciones de gran dificultad debido a nuestra capacidad de superación. A través del trabajo psicoterapéutico se movilizan esas capacidades en beneficio de la persona que llega a consulta.
El psicólogo es pues un apoyo en un proceso por el que uno aprende a ayudarse a si mismo/a. No resuelve los problemas por el cliente sino que los convierte en manejables, en oportunidades para un cambio o aprendizaje.
Tengo problemas pero ¿necesito a un psicólogo?
Hay situaciones en la vida que hacen imposible que el cambio se produzca espontáneamente o gracias a la ayuda de amigos o familiares, esto es así ya que precisamente ellos pueden estar formando parte de la situación que rodea al problema. Los consejos o ayuda de amigos y familiares no son del todo útiles porque no pueden ser neutrales ni ver las cosas como uno las ve. O quizás, uno no se siente capaz de explicar lo que le pasa con detalle porque eso les haría sufrir o enfadarse. En este caso, la ayuda de un profesional externo al ámbito de la persona puede ser la mejor alternativa.
Aunque el psicólogo está capacitado para tratar problemas serios de trastornos neuróticos, psicóticos, depresiones severas, etc. no es necesario que padezcas una patología para poder acudir a un psicólogo. Hay una idea extendida de que sólo los enfermos mentales han de acudir a un profesional, también hay quien piensa que acudir a un psicólogo implica confesar un fracaso personal. Son ideas totalmente erróneas. Incluso una persona sin problemas “serios” puede obtener un gran beneficio al someterse a un proceso psicológico orientado a un autodescubrimiento de uno mismo.
¿Tendré que explicar intimidades a un extraño…? No creo que pueda.
Las sesiones en terapia implican dialogar sobre el motivo de demanda que trae la persona que acude a terapia y eso implica un grado de apertura y confianza con el terapeuta, esa confianza es clave para conseguir avances en la terapia y hace precisamente que la vivencia de los clientes no sea la de explicar cosas privadas a un extraño. Los terapeutas están formados para centrarse en entender la perspectiva subjetiva del cliente sin juzgarla ni hacerle sentir incómodo al respecto.
Es importante resaltar que el terapeuta se guía por un código ético que le impide revelar cualquier aspecto privado de sus clientes, por lo que la privacidad y confidencialidad de la información que se trata en las sesiones queda preservada.
¿Es mejor acudir a un psicólogo o a un psiquiatra?
Son dos enfoques distintos que responden a dos visiones diferentes del ser humano. El trastorno psicológico visto como un desequilibrio químico del cuerpo, del cerebro o del sistema nervioso o contemplado como producto de una dificultad de vivir de acuerdo a las propias necesidades psicológicas.
El primer enfoque utiliza medicamentos y psicofármacos y el segundo utiliza las herramientas propiamente psicológicas. Herramientas que promueven el cambio, el desarrollo psicológico y el incremento del nivel de conciencia de la persona.
Hay ocasiones que por la gravedad o complejidad del problema requieren de un trabajo conjunto a nivel psicológico y a nivel medico (psiquiatra), dando unos resultados muy positivos en la resolución del problema que padece la persona.
¿La psicoterapia no es una solución de segunda en comparación con la medicación?
En absoluto. En muchas condiciones de relevancia clínica la psicoterapia ha demostrado ser más eficaz que los fármacos y además sin efectos secundarios.
Los resultado de las recientes investigaciones en neurociencia y neuroimagen indican que la terapia psicológica produce cambios en la estructura y el funcionamiento del cerebro y que estos cambios van asociados a una mejoría en la sintomatología del paciente.
Dado que la psicoterapia se basa en procesos psicológicos de aprendizaje, sus beneficios van más allá del final de la psicoterapia, lo cual no siempre sucede con un fármaco.
En muchos casos la psicoterapia debería considerarse la primera opción, y sólo recurrir a los fármacos si no se responde bien a ella.
¿Cuántas sesiones son necesarias para solucionar un problema?
Respecto a la duración del tratamiento no se pueden fijar períodos establecidos de antemano puesto que se ha de tener en cuenta: los problemas que traen a la persona a consulta, el proceso individual, las metas a alcanzar, incluso acontecimientos que tienen lugar fuera de la terapia ( por ejemplo, un divorcio, un cambio de trabajo o situación laboral).
Cada caso es único, así como lo es la persona que lo vive y su situación vital. No obstante, tanto el reconocimiento del problema como la intención de cambio son elementos que señalan un buen pronóstico para la consecución de cualquier objetivo que se quiera conseguir en terapia.
Duración y frecuencia de las sesiones.
Las visitas tienen una duración aproximada de unos 50-60 minutos.
La frecuencia de las visitas acostumbra a ser semanal, pudiéndose acordar una periodicidad quincenal o incluso mensual a medida que se vaya produciendo una remisión de la sintomatología o un logro gradual de los objetivos fijados, según la evolución y circunstancias de cada caso.